martes, 24 de agosto de 2010

Tulsa y el inagotable culto adolescente

Tulsa es un raro objeto de deseo, una extraña obra maestra de la fotografía que se publicó originalmente en 1963 por un imberbe Larry Clark (sí, el director de Kids o Ken Park). Habituado al submundo de las drogas y los adolescentes, Clark creó (y sigue creando, con más o menos acierto) un universo emocional alrededor de los púberes, esos seres ególatras en torno a los que gira la civilización moderna.



Tulsa fue un libro visionario, inencontrable en este país (yo, al menos, nunca lo he visto a la venta, ni en reediciones ni nada por el estilo), que marcó indefectiblemente a autores de la talla de Coppola o Gus Van Sant. De hecho, hay quien asegura que la maravillosa fotografía y estética de La ley de la calle salió de sus páginas.

Mis escasos conocimientos del mítico libro, el primero de Clark (tiene otros, aunque no con tanta leyenda), vienen avalados -es difícil hablar de lo que no se ha visto nunca- por fotografías perdidas en estudios cinematográficos sobre Clark, imágenes en Internet, etc. Les recomiendo que se acerquen al interesante e intenso mundo adolescente, ese lugar donde todo era posible (a algunos cada vez nos queda más lejos esa etapa), la vida intensa y la muerte parecía poco probable o que solo le ocurría a otros (de ahí, probablemente, los excesos). No me extraña demasiado que Larry Clark quedara atrapado por ellos. La ingenuidad y la valentía inconsciente son agradables de observar una y otra vez. Sobre todo, a algunos ya, de lejos.








[PJ Harvey, la musa underground de los 90 (en lo musical, Sevigny sería en la imagen) con esa adorable energía rockera femenina. Conocerla es amarla]


1 comentario:

  1. mola esta entrada, pero queremos saber más de tu rutina, tus sentimientos, tus fantasías sexuales, tu pasado mod, tu merienda favorita, tu relación con tu madre, tus temores, tus experiencias adolescentes, tu relación con las drogas, las mujeres, los nilos, los hombres mayores, tus filias, tus fobias...Queremos que hables de AMOR y de ODIO de vida y de muerte, de fajas sobre la cama y pantalones en los tobillos, de colillas y mujeres que amaste y no te quisieron, de mujeres que te amaron y nunca podrás quererlas, de ese amigo que evitas y ya no reconces, de esa noche en que cambió todo, de la angustia y la desesperación, la paz, la resaca y el mal aliento...

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